Dia Internacional de la Mujer
Derechos de la Mujer y la Niña
- Fecha: 08-03-2014
- Nora Bouhorma
El 8 de marzo es ya
una fecha consolidada para reflexionar sobre los derechos de la mujer de hoy y
de la niña que será la mujer de mañana. Es una oportunidad para incrementar el
apoyo a los derechos y la participación de las mujeres, reivindicando el
derecho a la vida, a una vida digna, a la libertad, a la educación, al ejercicio
pleno de la ciudadanía, a la salud, a no ser discriminadas, excluidas ni
violentadas, a visibilizar la inestimable aportación de las mujeres a lo largo
de la historia en todas las esferas sociales y a continuar con la labor de
promover, garantizar el ejercicio de nuestros derechos y a exigir cambios en
valores y actitudes sociales.
Hagamos un poco de
historia, cada año, el 8 de marzo, se conmemora el Día Internacional por los
Derechos de las Mujeres en honor a los siguientes hechos: El 8 de marzo de
1908, 130 mujeres trabajadoras de una fábrica textil en Nueva York deciden ir a
la huelga en reivindicación de mejores condiciones de trabajo. El encierro de
éstas en la fábrica terminaría en tragedia, después de que un incendio
provocado arrasara la fábrica con ellas dentro. En 1975, Año Internacional de
la Mujer, Naciones Unidas comienza a celebrar el Día Internacional de la Mujer.
En 1993, en la Conferencia Mundial de Derechos Humanos, la comunidad
internacional a través de la Organización de Naciones Unidas (ONU), declara que
los derechos humanos de la mujer y de la niña son parte inalienable, integrante
e indivisible de los derechos humanos universales.
Esta declaración marca
un punto de inflexión dado que reconoce el compromiso de los derechos humanos
como un instrumento de articulación a través del cual se regulan las conductas
de hombres y mujeres hacia un determinado modelo de convivencia en el que se
moldean las identidades de género, necesarias para reconocer las diferencias
entre hombres y mujeres y contribuir así con la eliminación de tratos
discriminatorios contra ciertos grupos, en especial las mujeres y las niñas,
quienes viven la carga cultural, económica y sociopolítica que favorece la
discriminación femenina y se propaga en las ideas y prejuicios sociales que se
entretejen en el género.
Desde PROYECTO
SOLIDARIO hemos enfocado gran parte de nuestra labor en garantizar el derecho a
la educación, como un derecho humano que permite el ejercicio efectivo de otros
derechos y favorece al empoderamiento de las niñas y las mujeres. Sin embargo,
el derecho a la educación se les niega a muchas de ellas, sea por cuestiones
culturales, por falta de compromiso político, financiación educativa
insuficiente y las repercusiones de las desigualdades. La intersección del
género con otras identidades sociales (como por ejemplo la etnia, religión o
creencia, raza, estatus económico, sexualidad, edad o discapacidad) significa a
menudo que grupos de niñas o mujeres más marginados tienen menos posibilidades
de acceder a una educación de calidad. Tener acceso a
una educación gratuita y de calidad es particularmente importante para las
niñas y las mujeres, no sólo porque la educación las habilita para el ejercicio
de otros derechos, sino también por el impacto que tiene en la familia y en la
sociedad, los logros educativos de la mujer.
En un día como hoy somos
conscientes de los logros obtenidos, ahora bien, hemos de reconocer que siguen existiendo
lugares en el mundo en los que las condiciones de las mujeres y las niñas las
convierten, sin necesidad de más calificativos, en esclavas. Queda mucho camino
por recorrer para garantizar el goce de los derechos humanos de las niñas y
mujeres, y llegar a la equidad.